Si no se detectan, las fugas de gas son extremadamente peligrosas y pueden tener consecuencias fatales que van desde un incendio hasta la muerte por envenenamiento. Por eso es importante saber qué hacer y cómo actuar para protegerte a ti y a tu familia de los desechos tóxicos que pueden quedar una vez que están bajo control.
Las instalaciones de gas han cobrado una importancia cada vez mayor en los últimos años por ser mucho más económicas que las eléctricas, y al mismo tiempo por los riesgos que suponen, han sido objeto de diversas actuaciones de prevención de accidentes en la administración pública. Si bien las catástrofes que pueden causar las fugas de gas son bien conocidas, se menciona poco el daño a menor escala que causan, como envenenamiento o incluso asfixia, que pueden ser fatales si no se tratan.
Hay tres factores infalibles para que se produzca una fuga de gas:
- El descuido,
- El envejecimiento de los equipos
- La falta de mantenimiento de electrodomésticos como calderas o estufas.
Un cuarto factor aumenta el riesgo de fugas de gas: los sistemas de ventilación deficientes, una característica muy típica en las edificaciones más antiguas.
Medidas de emergencia por fuga de gas
- En caso de fuga de gas, lo primero que debes hacer es cerrar la llave de paso, y en caso de daños mayores, contactar con tu asesor de seguros para que consulte la cobertura de tu seguro de hogar en este caso. Después de cerrar la llave de paso, encuentre formas de ventilar la cocina y toda la casa para permitir que el gas se disipe y pueda entrar aire fresco y limpio.
- Si la fuga fue de gas butano, asegúrate de ventilar las zonas más cercanas al suelo ya que es más pesado que el aire y tiende a hundirse. Si la fuga es de gas natural, la ventilación debe dirigirse a las partes más altas de la casa ya que es mucho más ligera y tiende a subir.
- No encienda ningún interruptor o aparato al ventilar, y mucho menos velas o incienso para dispersar el olor a carbón. Es necesario a toda costa evitar chispas que puedan provocar un incendio o una explosión, provocando daños irremediables.
- Comuníquese con su comercializadora de gas de inmediato para informarles lo que está sucediendo y solicite ayuda si lo considera necesario. Según la gravedad de la fuga y si el accidente se debió a daños internos, es posible que lo envíen a un experto que determinará el problema y repare los accesorios.
Precauciones para fugas de gas
- Según la legislación estatal, las compañías de gas deben inspeccionar si hay fugas y mala combustión cada cinco años. Quienes dispongan de una caldera de gas en su vivienda, están obligados a realizar una revisión de la instalación de gas por posibles averías y desperfectos.
- Si vive en un edificio antiguo o tiene inquietudes sobre el estado de las líneas de gas, informa al dueño de la casa para que pueda tomar las medidas necesarias y estar al tanto de las reparaciones futuras que tendrá que hacer.
Las instalaciones y equipos relacionados con el gas siempre deben ser inspeccionados e instalados por profesionales certificados.
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